Por Héctor Coca
Psicólogo licenciado
Comienzan los primeros planes para el regreso a la vida fuera de la casa luego de tres meses en el encierro debido a la pandemia del COVID 19.
Tres meses es suficiente tiempo como para que la mayoría de nosotros ya haya hecho un ajuste a la vida en el encierro, con actividades diarias de trabajo, diversión, el descubrimiento de estilos de vida nuevos y sobretodo, la sensación de completa seguridad estando adentro.
Al principio de los mil novecientos en las zonas rurales de los estados más fríos de la nación norteamericana muchos familiares pasaban tres y cuatro meses de invierno estando en una cabaña de madera. Eran meses de no salir a nada y sin la tecnología de hoy para hacer más llevaderas estas experiencias.
En estas comunidades las personas podían luego notar que muchos describían una serie de síntomas similares, entre los que se observaban pérdida de sueño o sueño excesivo, irritabilidad, alucinaciones, dificultad con el estado de ánimo, ansiedad, desesperación al punto de salir de la casa y poner en riesgo la vida propia y la de otros. De esta tendencia surge luego el término popular ‘Fiebre de la Cabaña’.
La fiebre de cabaña no es un término reconocido por la ciencia conductual al momento. Son una serie de síntomas que se encuentran en estudio debido a lo que se ha observado. Es debatible en el año 2020 si es un problema que nos afecta en esta pandemia pues los hogares están equipados diferente y la tecnología es de tal avance que pudiéramos hacer nuestra vida desde el hogar sin tener que salir a nada.
Lo que sí pudiera ser una situación que nos afecte es pensar en la idea de salir luego de un completo ajuste a vivir dentro, y la desconfianza o temor de contagio.
No todo temor es una fobia. La fobia es un miedo a algo que no nos puede hacer daño. El miedo es una de seis emociones naturales. Nos permite estar alerta ante los peligros. Nacemos equipados en el cerebro medio con la capacidad de sentir la tristeza, coraje, alegría, culpa y soledad.
Las emociones no son otra cosa que alarmas de protección. Nadie debería sentirse mal por sentir una emoción particular. La manera de superar cualquier temor es el acercamiento gradual. Hay personas que ya tienen que salir, sin remedio, debido a sus circunstancias.
Toma en cuenta lo siguiente para que regresar sea más cómodo y seguro:
- Igual que el encierro causó incomodidad al principio, ajustarnos al regreso también lo causará.
- Respeta tu miedo. Sales a navegar y convivir con un peligro existente todavía. El miedo es lo que te ayuda a poder hacerlo protegiendo tu seguridad.
- Tememos porque desconocernos. Recuerda que no regresas a la vida de antes. Conocer el juego nuevo, te dará más seguridad gradualmente.
- Antes de salir edúcate y has un plan. La autoridad más importante en el tema de COVID-19 es el Centro para el Control de Enfermedades (CDC). Entra a la pá Los pasos a seguir sobre diferentes tópicos relacionados al virus están claramente resumido.
Recuerda que el miedo deseamos controlarlo, no dejar de sentirlo.