Por Redacción Es Noticia
redaccion@esnoticapr.com
Los medios estadounidenses anunciaron que según una encuesta de la Asociación Nacional de Economía Empresarial realizada a 45 economistas, Estados Unidos se encuentra en una recesión y seguirá así durante la primera mitad del año.
Los resultados indican que será una recesión corta y aguda para la primera mitad de 2020, a medida que la pandemia de coronavirus restringa severamente la actividad económica. Según el periódico El Vocero, este escenario podría reflejarse en Puerto Rico, ya que todo lo que acontece en la nación estadounidense tiene un efecto directo sobre la economía local.
“Yo creo que el concepto de recesión es moderado para describir todo lo que está pasando, que es la caída de la economía por más de dos trimestres. La situación es muy severa por el deterioro del total en el gasto de los consumidores e inversionistas. Esto va camino a algo más profundo”, indicó el economista Santos Negrón.
Se proyecta que el mercado laboral de Estados Unidos sufrirá un gran impacto a medida que el brote de coronavirus mantenga cerrados los negocios, por lo que se espera la pérdida de 4.58 millones de empleos en el segundo trimestre. Lo mismo podría ocurrir en Puerto Rico, que lleva más de una década en una recesión que se ha agravado por el efecto de huracanes, terremotos y el Covid-19, con un efecto directo en el ciudadano común y el empresario.
“Hay una reducción de gasto significativa y ya vemos despidos en diferentes industrias, empresas y universidades privadas, por lo que la economía de Puerto Rico se va a debilitar y habrá poca inversión en los negocios. La caída en la actividad económica general traerá una contracción en la producción y el empleo. Puerto Rico está atado a Estados Unidos, por lo que se mueve en la misma dirección. Vamos a ver un despliegue en los gastos por la entrada de las ayudas económicas federales, pero ese repunte en la demanda no tiene continuidad”, indicó el economista, refiriéndose a que las ayudas son temporales.
Lenta recuperación
Por su parte, Kenneth Rivera, contador público autorizado (CPA), anticipó un lento panorama de recuperación debido a que la Isla ya experimentaba una situación económica delicada desde 2006.
“Todo lo que ocurra en Estados Unidos tiene relevancia y consecuencia en la Isla, pero la economía de aquí es más pequeña y frágil. Las consecuencias son más marcadas para nosotros, que tenemos retos geográficos y para hacer negocios, además de la Junta de Control Fiscal. La economía está bastante débil y creo que la aspiración debe ser a volver a como estábamos antes del Covid-19 y los terremotos”, declaró Rivera.
Lo mismo opinó Francisco Rodríguez, presidente y CEO de la firma Birling Capital Advisors, quien comentó que la situación sanitaria a nivel mundial repercutirá negativamente en la recuperación de la Isla —que ya contaba con una economía maltrecha— así como en el panorama comercial.
“En el 2019 teníamos un crecimiento moderado, pero el coronavirus ha creado retos gigantescos a nivel de comercio, por lo que veremos aumento en las quiebras, desempleo y el cierre de entre 10,000 y 12,000 negocios. Con la crisis mundial y sus efectos no vamos a poder volver a la normalidad hasta que haya una vacuna (contra el Covid-19), pero esto obliga a que se revalúe la forma de hacer negocios y si vale la pena operar en estas condiciones. Muchos (comercios), si van a abrir, será de manera distinta”, señaló.
Según su punto de vista, los niveles de seguridad y sanidad actuales impactarán varias generaciones, alterando el comportamiento del consumidor y trayendo nuevas oportunidades en la reinvención de los negocios.
“Muchos negocios no van a poder recobrar su solvencia y liquidez económica. La tendencia será que incrementarán el trabajo remoto. Se crearán nuevos sistemas de ventas y se acelerarán las innovaciones tecnológicas”, dijo Rodríguez.
Urge vacuna contra Covid-19
A pesar de la abrupta recesión, los economistas encuestados de la Asociación Nacional de Economía Empresarial se mostraron optimistas de que la economía se recuperará en la segunda mitad de 2020, creciendo a una tasa de casi un 6% a finales de año. “El pronóstico medio sugiere que las condiciones mejorarán para fin de año con el apoyo de un agresivo estímulo fiscal y monetario”, dijo la presidenta de la asociación, Constance Hunter.
Sin embargo, el economista Negrón no comparte esta proyección si no aparece una vacuna que detenga la propagación del coronavirus, por lo que entiende que la economía de Estados Unidos y Puerto Rico seguirá decayendo.
“Si no hay vacuna, todo se seguirá contrayendo rápidamente, porque no tenemos experiencia con esta situación. Los análisis indican que de decaer más del 10% el Producto Bruto Interno (PIB) de Estados Unidos en el tercer y cuarto trimestre, será una recesión agravada, aunque todavía es muy prematuro hablar de depresión. La economía va a estar bien débil”, añadió Negrón.