Por Sandra Caquías Cruz
GUAYANILLA – El aviso sobre el paso de una tormenta tropical por la isla mantiene en vilo a los residentes de la comunidad El Faro y Playa, en este pueblo, muchos de los cuales rechazan salir de sus viviendas aun cuando llevan días con el mar en los patios de las residencias.
El terremoto del pasado 7 de enero acercó el mar a las residencias, una situación que se complica con la marea alta, pero la tierra no para de temblar. El alcalde Nelson Torres Yordán dijo que estudios de suelo apunta a un hundimiento de aproximadamente seis pulgadas.
Mientras, las familias sobreviven las continuas amenazas: terremoto, tormenta y la pandemia del coronavirus.
Carlos Echevarría, uno de los residentes de El Faro, rechazó salir del lugar. “Por el momento yo me quedo”, expresó el hombre sobre las medidas que tomará ante el paso de la tormenta. Destacó que lleva 15 años viviendo en la comunidad El Faro.
Otro que se resiste a salir de ese vecindario es Miguel Ángel Pola Borrero. “Yo me quedo, que mi esposa se vaya para el refugio con mi hija de 4 años. Esta es mi casa. Ese es mi sueño”, señaló al tiempo que explica la inversión que hizo para tener esa estructura.
“Yo muero ahí. Yo muero en esa casa. Si sigue metiéndose el mar, tengo dos yolas preparadas (para salir)”, expresó Pola Borrero. “A mí no me sacan de aquí. Aquí nos quedamos”, afirmó.
Mientras, Ramiro Ramírez, también residente en la comunidad El Faro, aseguró que de ahí no sale. “Aquí todo el mundo tiene miedo, porque aquí, cuando hay un temblor, se montan en los carros y salen por ahí pa’ allá, pero yo no me voy de aquí”, dijo.
Comunidad se inunda en dos áreas
Wilfredo Tirado Vélez, residente en otro sector de la comunidad El Faro, explicó que la comunidad se inunda en dos áreas: los que viven a orillas del mar y los que están aledaños a una finca de farináceos por lo que en uno de los casos es agua salada y en el otro no.
Explicó que la marea comenzó a inundar la comunidad tras los terremotos, pero que el otro sector se inunda porque supuestamente permitieron hacer una zanja para que el agua de lluvia salga de la finca de farináceos y esa agua termina en la comunidad El Faro.
“Esto no es agua de la marea, es agua que viene de la finca de los guineos. Dice que esa agua no la pueden tirar al río porque (el Departamento de) Recursos Naturales los multas y la desviaron a las residencias”, señaló Tirado Vélez. “El alcalde de Guayanilla tiene conocimiento de esto”, afirmó.
Comunidad Playa a la expectativa
En el sector La Rinconada, en la comunidad Playa, se mantiene a la expectativa de lo que pueda ocurrir con el paso de la tormenta. Mientras, el municipio utilizaba maquinaria para abrir paso al agua de la desembocadura de una quebrada.
El residente Pedro Rosario señaló que el municipio dragó el caño y eso ha ocasionado inundaciones en la comunidad.
Explicó que debido a esas inundaciones y los temblores una parte de su vivienda se está hundiendo porque lo que comenzó gestiones para mudarse a otra comunidad.
El Gobierno informó que en Guayanilla habilitarán como refugio:
- escuela Gloria Borrero
- centro comunal del barrio Indios
- centro comunal del residencial Bahía
