Por Redacción Es Noticia
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Una puertorriqueña fue sentenciada el pasado martes a cumplir cadena perpetua por la terrible muerte de su bebé, a quien abandonó por diez días para irse de vacaciones a Puerto Rico.
La bebé Jaylin Candelario, de 16 meses, fue abandonada en su residencia en la ciudad de Cleveland, Ohio, donde reside la madre Kristel Candelario, de 32 años y quien se declaró culpable de los cargos en su contra el pasado 22 de febrero por hechos ocurridos en Junio del año pasado
La doctora forense que testificó en el caso declaró que la bebé perdió un tercio de su peso, hasta 7 libras, durante los diez días en los que sus llantos no fueron atendidos, dado que la mujer se marchó con su novio a Puerto Rico a disfrutar de vacaciones sin haber dejado la niña al cuidado de alguna persona.
Durante el dramático testimonio, la sargento Teresa Gómez, de la División de Homicidios de Cleveland, Ohio, declaró -entre llanto- que Jaylin fue encontrada por su propia madre y que intentó ocultar lo ocurrido vistiendo con ropa limpia el cadáver de su hija, pero la evaluación forense confirmó que la menor se deshidrató hasta consumir las propias heces de su pañal con el que la vistió su madre antes de partir.
Cuando regresó de su viaje, la madre fue quien llamó al Sistema de Emergencias 9-1-1 para reportar el fallecimiento.
«Era un hermoso ángel cuya vida fue truncada sin razón. Esta tragedia nunca debió haber ocurrido» declaró la oficial en sala.
«Cuando nos notificaron sobre este caso, a todos se nos rompió el corazón, pero cuando empezamos a indagar en la investigación fue más que horrible… esta bebé fue dejada para valerse por sí misma durante once días sin comida, sin leche, la ropa que llevaba y el pañal que llevaba», expresó visiblemente conmovida.
«Ella llamaba a su madre, necesitaba a su madre y su madre la traicionó… Candelario priorizó unas vacaciones en Puerto Rico con su novio que la salud, seguridad y bienestar de su propia hija. Ella escogió satisfacer sus propias necesidades y deseos, que las de su propia niña» continuó declarando la Sargento Gómez.
«Este es un caso que yo, y todos los que investigamos, vamos a llevar marcado en nuestras mentes y nuestros corazones por siempre», concluyó antes de que un juez emitiera sentencia.
Como parte de la evidencia, se presentó un video de una cámara de vigilancia de una casa vecina que captó los gritos de la niña hasta dos días después del abandono
«Tal y como usted no dejó a Jaylin libre de su confinamiento hasta que murió, usted también debe pasar el resto de sus días en una celda, sin libertad», declaró el juez Brendan Sheehan, de la Corte del Condado de Cuyahoga, donde se vio el caso.
«El lazo de una madre con sus hijos debe ser de los más puros y sagrados… usted cometió el más alto acto de traición… Esa pequeña bebé perseveró esperando que alguien la salvara. Y usted lo pudo haber solucionado con una llamada telefónica. En su lugar, veo sus fotos en la playa mientras su bebé se comía sus propias heces para sobrevivir», manifestó el togado antes de sentenciarla.
«Lo siento» declaró por su parte Candelario. «Todos los días le pido perdón a Dios y a mi hija Jailyn», dijo en su defensa que atravesaba «una mala etapa».
«No pasa un día que no deje de pensar en ella», sostuvo en español. De igual forma sus padres intentaron interceder por ella alegando que la madre padece de problemas mentales, pero el juez dictaminó condena sin derecho a probatoria. También declaró que no tenían idea de lo que estaba ocurriendo.
La fiscal Anna Faraglia expresó que «los animales cuidan de sus crías mejor».
En el caso también intervino la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
