Por Ana Delma Ramírez
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La destacada voleibolista ponceña Raymariely Santos de regreso a Puerto Rico y al voleibol superior, se mantiene conectada con los directivos del club de voleibol de Santorini, Grecia donde otrora jugó.
“Estoy tiste, impactada, preocupada, me comunico con ellos constantemente, me han informado que debido a los temblores todo el equipo fue trasladado a Atenas, las jugadoras, la directiva en fin todos, de ser necesario y luego que conozca sus necesidades, podría iniciar algunas estrategias para ayudarles, reciprocar todo lo que hicieron por mí en mi estadía en esa isla” dijo a Es Noticia.
Raymariely fue homenajeada este pasado fin de semana en la entrega de uniformes de las Ponce Leonas Señoriales que inician un torneo a principios de marzo.
Su trayectoria deportiva es impresionante, sus resultados denotan el empeño y dedicación que ha puesto en su deporte de la malla alta.
“Se ha roto con el mito que un voleibolista debe retirarse luego de los 30 años, ahora nos cuidamos hay mas conciencia de mantener nuestros cuerpos bien cuidados, regresar a jugar en el voleibol superior ha sido fascinante para mí, con las Criollas de Caguas me siento muy a gusto, me han acogido bien, se acabó esa rivalidad que tenían cuando jugaban con Ponce” dijo a Es Noticia.
Raymariely tiene presente lo que hará cuando decida retirarse, cuando llegue su momento de la transición: ha iniciado una academia donde impartirá clases y entrenamientos de voleibol. Tiene experiencia docente y se mantiene al tanto de las necesidades de desarrollo de su deporte.
“Mi corazón late rojo y negro, al jugar con y por Ponce” manifestó, hace falta que Ponce tenga un equipo femenino en la liga superior, tiene que venir de vuelta nuestro equipo, el talento está y el desarrollo se hace actualmente y a largo plazo”.
Insistió la veterana jugadora que tiene 32 años y siglos de batallas con victorias que ha sido acertado que la Federación Puertorriqueña de Voleibol haya regresado a desarrollar el voleibol femenino juvenil con el superior.
La presencia de Raymariely con este equipo de jugadoras juveniles Las Leonas de Ponce Señoriales fue una inspiración, un motor motivador para que según sus palabras “vuelen alto, se crezcan, se entreguen en la cancha de manera unidas y apoyándose.
