Los niños y las personas que no están vacunadas están en mayor riesgo porque su sistema inmune no está tan preparado para combatir ese tipo de enfermedad.
Además de la alegría navideña, las reuniones familiares y festejos de temporada pueden convertirse en ambientes idóneos para la propagación de enfermedades respiratorias.
Esto, principalmente, debido a las muestras de afecto sin la higienización adecuada, la aglomeración de personas en espacios cerrados, exposición a cambios bruscos de temperatura y la falta de descanso que, va debilitando el sistema inmunológico.
De esa manera, se elevan los casos de influenza, Covid-19, micoplasma y el virus respiratorio sincitial que, afectan aun más a poblaciones vulnerables, entre estos, niños, adultos mayores y pacientes diagnosticados con condiciones crónicas.
Según el emergenciólogo Carlos González, “en navidades, siempre hay más fiesta, más reuniones, más viajes y menos descanso porque queremos estar en todas y, eso es la combinación perfecta para tener un aumento en las enfermedades respiratorias”.
“Eso porque los puertorriqueños somos sociables y tratamos de mantenernos en contacto; es algo entendible. Pero tenemos que entender que no debemos excedernos para poder tener una confraternización que nos dé la oportunidad de reducir esos riesgos”, expresó.
El galeno explicó que el sistema inmune comienza a responder menos cuando la persona no descansa. Igualmente, aseguró que “si estamos en áreas con ventilación, es una de las cosas que nos va a ayudar a que los riesgos sean menores”.
“Lo mejor es, si va a tener un encuentro, que sea al aire libre porque no hay exposición tan marcada como si fuese un área cerrada. Si va a tener una fiesta que, no sea dentro de la casa y si tiene patio, es mejor, porque tendrían menos exposición en cuestiones de enfermedad”, recalcó.
Entretanto, aseguró que, “los niños y la gente que no está vacunada está en mayor riesgo porque su sistema inmune no está tan preparado para combatir ese tipo de enfermedad”.
Además, señaló, “las personas mayores de 50 años siempre estarán más a riesgo de contagio de esas enfermedades que, normalmente son de tracto respiratorio superior, simplemente dolor de garganta o mucosidad, pero puede convertirse en una pulmonía o de tracto inferior que es algo más serio”.
Como recomendación, subrayó el uso de mascarilla para ayudar a reducir la exposición, aunque “quizá no todos tengan que usarla, sino la persona que considere que está en riesgo porque tiene alguna condición médica”.
En cuanto a los síntomas, mencionó que, “las enfermedades respiratorias tienden a tener mucho solapamiento; siempre va a ser un poco de congestión, quizá dolor de garganta, problemas para respirar, tos intermitente o, tal vez más persistente en algunos momentos”.
“Estos virus cuando actúan, lo hacen en el cuerpo completo. Una enfermedad respiratoria se puede convertir en gastroenteritis, con náuseas, vómitos o diarreas. Así que los síntomas no se van a presentar igual en todas las personas”, resaltó.
“Pero si en la casa, descansando, siente que no está mejorando o que la falta de aire sea severa; cambios en el estado mental que, no esté actuando igual, que la fiebre sea persistente, a pesar de que tomó medicamentos para abatir la fiebre, o dolor de pecho, hay que considerar la Sala de Emergencias”, recomendó.
Para información sobre el Centro Médico Episcopal San Lucas y los servicios que ofrece, accede a sanlucaspr.org, llama al 787-844-2080 o síguelos en sus páginas de Facebook, Instagram, LinkedIn y YouTube.
Por Centro de Salud Conductual San Lucas



















































