Por Cyber News
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Un estudio preliminar realizado por el Instituto de Estadísticas de Puerto Rico y el Departamento de Justicia reveló que una de cada cuatro mujeres querellantes en casos de violencia doméstica enfrenta un nivel de peligrosidad severo o extremo de ser asesinada por su pareja o expareja.
El análisis, basado en 2,021 casos registrados entre enero y junio de 2024, se desprende de la Evaluación de Riesgo (Danger Assessment) que los fiscales han comenzado a utilizar durante la investigación criminal.
“Estos datos no solo representan una fotografía de la realidad, sino que son el resultado de un proceso riguroso de análisis estadístico liderado por el Instituto de Estadísticas, en el cual se validaron las hojas de evaluación de riesgo, se integraron a una base de datos centralizada y se realizaron los análisis necesarios para identificar los factores de riesgo más críticos”, afirmó el director ejecutivo del Instituto de Estadísticas, el doctor Orville Disdier Flores.
Los hallazgos indican que las perjudicadas tienen una edad promedio de 36.3 años, con el 62.1 por ciento entre 20 y 39 años. Además, las mujeres con peligrosidad severa o extrema tienen casi 13 veces más probabilidades de haber sido atacadas o amenazadas con un arma. El 79.1 por ciento de las víctimas con dicho nivel de riesgo teme que su pareja o expareja pueda matarla.
“Estos datos no son solo números, son un llamado urgente a la acción conjunta para reforzar las estrategias de prevención, protección y justicia para las víctimas de violencia doméstica”, enfatizó el secretario de Justicia, Domingo Emanuelli Hernández.
En cuanto a la utilidad de la evaluación, la jefa de los fiscales, Jessika Correa González, señaló: “El análisis de la Evaluación de Riesgo permite que los fiscales tomen determinaciones con mayor certeza y puedan insertarse en los esfuerzos de prevención. A su vez, contribuye a que puedan orientar a las víctimas y canalizar las ayudas y servicios que estas requieran, incluyendo medidas de seguridad”.
Los resultados del estudio también destacan que entre los municipios con mayores tasas ajustadas de peligrosidad severa o extrema se encuentran Barranquitas, Salinas y Patillas.
Ante estos hallazgos, el Instituto de Estadísticas y el Departamento de Justicia coincidieron en la importancia de dar continuidad a la recolección y análisis de datos, así como en el desarrollo de intervenciones más focalizadas y efectivas. El secretario de Justicia comentó además que estos datos permitirán identificar las zonas y poblaciones más vulnerables, mientras que las agencias de ley y orden podrán reforzar su respuesta, mejorar las capacitaciones y diseñar nuevas campañas de prevención y educación.