Por Miguel Díaz Román
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El secretario del Departamento de Salud, Lorenzo González Feliciano, sostuvo que la economía local se abrirá de manera progresiva en la medida que se registre una merma en las cifras de contagios por el coronavirus y advirtió será a principios de junio cuando se deberá registrar una reducción en la incidencia de contagios.
González Feliciano indicó que la economía se abrirá de manera progresiva en el sector de los servicios directos a la ciudadanía y señaló que “la economía de Puerto Rico no se puede activar a costa de la salud de los puertorriqueños”.
“Hemos visto que esa tendencia cuando la curva se hace plana (reducción en la incidencia de casos) es a principios de junio y debería haber modificaciones al toque de queda ”, dijo el secretario durante una entrevista en la estación de radio WKAQ.
Pero no está claro si las organizaciones que representan al sector comercial e industrial del país aceptarán extender el periodo de espera para abrir la economía hasta el mes de junio, lo que implica que durante el mes de mayo el toque de queda y cierre de comercios permenecerá vigente sin experimentar cambios o con cambios superficiales.
En las últimas horas el sector privado incrementó la presión para que el gobierno acceda a reabrir la economía por medio de entrevistas, exhortaciones públicas de parte de figuras de opinión y de miembros de la clase empresarial.
En respuesta a esa presión ya la gobernadora Wanda Vázquez Garced reveló que pronto emitirá un anuncio sobre los nuevos cambios al toque de queda para permitir determinada actividad económica.
González Feliciano sostuvo que el Departamento de Salud ya comenzó a depurar los datos estadísticos con el fin de tener una herramienta para estimar el crecimiento o reducción de la incidencia del virus en el país y poder tomar decisiones informadas.
Pese a que fueron eliminados de la estadísticas de Salud 383 casos por que fueron contados dos y tres veces, González Feliciano se mostró satisfecho con la fiabilidad de los datos estadísticos que recopila la agencia y insistió que Puerto Rico no revela una inicidencia de casos positivos y de muertes como ha ocurrido en otros países.
El martes la presidenta del Laboratorio Clínico Toledo, Ilia Toledo, cuestionó la exactitud de las cifras de Salud sobre pruebas efectuadas de coronavirus. Toledo sostuvo que en la isla se han realizado más de 20,000 pruebas para detectar el virus, mientras el informe estadístico de Salud indica que se han realizado (ayer martes) cerca de 12,000.
Toledo sostuvo que solo su laboratorio ha realizado más de 11,000 pruebas.
Otro aspecto polémico en el que se ha visto involucrado el secretario es la pobre cantidad de pruebas realizadas para detecar el virus entre la población. González Feliciano dijo que continúan los esfuerzos para coordinar con alcaldes y hospitales el incremento de pruebas y señaló que existen 150,000 pruebas rápidas que se han distrbuido y que no se han usado.
”Que me digan si las van a usar porque yo las recojo y las llevo a otro lugar”, dijo el secretario.
Pero la realización de pruebas depende de que un médico lo ordene utilizando su criterio, es decir, que el doctor ordenará una prueba al paciente que demuestre síntomas compatibles con el coronavirus, lo que implica que el resto de la población no le serán administradas pruebas hasta que demuestre síntomas.
Además, ha trascendido que la necesidad de hacer pruebas indiscriminadamente en la población reside en que pueden existir muchos individuos contagiados con el virus que son asintomáticos y que pueden infectar a otros.
Hasta el día de hoy se han realizado 12,174 pruebas de coronavirus en la isla, lo que representan que solo el .38 % de una población estimada en 3.1 millones de habitantes. Del total de pruebas realizadas 1,378 han arrojado resultados positivos, 8,842 han sido negativas, 1,944 están pendiente de resultados y 10 permanecen con resultados inconclusos.
Incluso, la cantidad de muertes, hasta hoy estimada en 67 decesos, puede tener un marcado margen de error, pues Salud ha permitido que los médicos certifiquen como muerte por coronavirus aquellos fallecimientos de personas que mostraron síntomas compatibles con el virus, pero que no se le había realizado la prueba.
De las 67 muertes unos 21 decesos han sido certificados por médicos.
Aún con la poca cantidad de pruebas efectuadas por Salud, González Feliciano insistió en que la incidencia de la enfermedad es baja en Puerto Rico y presentó como ejemplo que la utilización de camas de hospital, de camas en salas de cuidado intensivo y de ventiladores es muy leve en la isla, lo que, a su juicio, es una señal que valida las cifras de Salud. El secretario también dijo que otro elemento que respalda su argumento es que en la isla no han ocurrido las avalanchas de muertes registradas en Nueva York y en España.
