Por Redacción Es Noticia
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Pese a que las pequeñas y medianas empresas serán las más afectadas por la paralización comercial ordenada por la gobernadora Wanda Vázquez Garced, el gobierno aún no ha delineado cuál será el paquete de ayudas que desplegarán para evitar el colapso de estos comerciantes, trascendió hoy.
El secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), Manuel Laboy, explicó a un diario que aun no han identificado las medidas que estarán disponibles para los pequeños empresarios, pero aseguró que podría tratarse de una combinación de ayudas federales y estatales.
“Todavía estamos en el proceso de finiquitar la respuesta a nivel estatal que complemente la ayuda federal que recibamos. Estamos haciendo una consideración exhaustiva de las distintas opciones que podemos implementar para mitigar el impacto que puedan tener. No hay duda de que el impacto económico negativo va a suceder y reconocemos que esto es crítico porque aun estamos arrastrando los estragos de los terremotos”, comentó Laboy al periódico El Vocero.
De acuerdo con el funcionario, el equipo económico y fiscal de la gobernadora está en conversaciones con la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico (Prfaa, en inglés) en la capital estadounidense para asegurar que la Isla pueda incluirse en los paquetes económicos que se legislen a nivel federal.
Entre estas ayudas, también destacó que Puerto Rico debe ser incluido la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para enviar $1,000 a los ciudadanos por la crisis que ha causado el coronavirus.
El funcionario señaló que a nivel estatal podrían implementarse consideraciones que podrían incluir moratorias, exenciones contributivas, créditos por empleo para patronos con dificultades económicas que logren retener a empleados y el uso de $200 millones del Programa de Subvención en Bloque para el Desarrollo Comunitario para la Recuperación ante Desastres (Cdbg-dr).
“Se están evaluando varias alternativas que podrían ser un suplemento de estos paquetes federales. Se están haciendo las gestiones directamente en Washington D.C. para asegurarnos que seamos parte de esos fondos que se identifiquen para las empresas”, dijo.
Igualmente, Laboy aseguró que están en negociaciones con la Small Business Administration (SBA) para que los negocios interesados puedan acceder a capital mediante prestamos en condiciones que sean favorables y no representen un riesgo adicional para los empresarios.
Laboy sostuvo, además, que vislumbran tener la aprobación de la Junta Federal de Control Fiscal para utilizar el Fondo de Emergencia para compensar unos programas de incentivos o ‘cash grant’ para los comerciantes afectados. Recientemente, el organismo regulador autorizó el uso de los $160 millones disponibles en el fondo.
Los presupuestos certificados para los años fiscales 2019 y 2020 hicieron disponibles $130 millones por año que se destinaron únicamente para atender posibles emergencias. El fondo tenía $260 millones acumulados a principios de año, de los cuales se retiraron $100 millones tras los terremotos y $160 millones para combatir los estragos del coronavirus.
“Una posibilidad que evaluamos es que si logramos un entendido con el ente fiscal para utilizar $25 millones del Fondo de Emergencia podríamos ayudar a 10,000 pequeños negocios a razón de $2,500 por cada uno. Esto es una cuarta parte de todos los negocios de Puerto Rico. Consideramos que es razonable”.
Tras la serie de terremotos que sacudieron a la región suroeste de la Isla a principios de año, el DDEC certificó $2.5 millones del fondo para ayudar con $2,500 en efectivo a mil pequeños empresarios.
Imperante retener empleos
Se estima que los pequeños y medianos negocios con menos de 50 empleados —que constituyen el 95% de los 43,000 establecimientos privados existentes en la Isla— generan la mitad de los empleos del sector privado, por lo que Laboy entiende que es imperante desplegar las ayudas lo antes posible.
El ejecutivo enfatizó que como la orden ejecutiva de la gobernadora ordena el cierre de todo negocio que no ofrezca un servicio esencial, estarán dándole prioridad a los que se vieron obligados a cesar operaciones en su totalidad y cuyos empleados se vieron restringidos de un salario por dos semanas.
Laboy enfatizó que, hasta el momento, el turismo es uno de los sectores que se está viendo mayormente afectado y uno de los que más le preocupa. Según datos de la Compañía de Turismo de Puerto Rico (CTPR), esta industria emplea a 80 mil personas aproximadamente en la Isla y es la cuarta que más empleos genera.
