Por Sandra D. Rodríguez Cotto
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SAN JUAN – Era un ambiente de fiesta y expectativa, como ya no se ve en la política partidista. Evocaba los multitudinarios mítines de Pedro Rosselló González en el Partido Nuevo Progresista en los 90 o cuando Sila Calderón buscó la gobernación por el Partido Popular Democrático, por la enorme cantidad de personas, el ánimo que expresaban y una alegría que se sentía en todo el Centro de Convenciones. Sólo que no era ni el PNP ni el PPD, sino el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) y su mensaje de Alianza.
Sobre 4,000 personas entraron a la asamblea del PIP, pero había cientos más en las afueras. Todos llegaron en decenas y decenas de guaguas escolares, o en sus carros privados, provenientes de distintos puntos de la isla. Una vez en la asamblea, ratificaron la candidatura de Juan Dalmau a la gobernación, María de Lourdes Santiago al Senado, Dennis Márquez a la Cámara de Representantes, y como parte de la Alianza, se comprometieron a respaldar para la Comisaría Residente en Washington, a Ana Irma Rivera Lassen, del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC).
Y en un escenario distinto al típico del PIP, a Dalmau lo presentaron su esposa, Grisselle Morales, y sus hijos, Gabriel y Sofía, para comunicar que su candidatura es un compromiso familiar. Evocó, en ese sentido, a otros candidatos como Rosselló González que fue presentado en varias ocasiones por su familia en mítines del PNP, o Aníbal Acevedo Vilá del PPD que en una convención fue presentado por sus hijos. Todo esto abonó a un ambiente distinto al típico que antes se veía en eventos del PIP.
Otros independentistas
La actividad estaba pautada para empezar a las 4:00 pm., pero la gente fue llegando desde el mediodía y se fueron pasadas las 6:00 pm. Comenzó con varios espectáculos artísticos, en lo que la gente iba entrando. El último grupo musical en presentarse, antes de los discursos, fueron Los Rivera Destino, quienes cantaron algunos temas emblemáticos y de corte político. Sindicalistas, líderes municipales del PIP, maestros e independentistas de otras colectividades se dieron cita desde temprano.
“Esto es una transformación paradigmática del independentismo. ¡Mira que mucha gente joven y caras distintas al independentismo tradicional!”, mencionó Julio Muriente, copresidente del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano, quien llegó a la asamblea del PIP porque esa organización apoya la Alianza. Muriente aspirará por el MVC al distrito representativo 33 (Gurabo, Juncos, Las Piedras) y precisó que sabe que el PIP postulará candidato en ese cargo, pero, dijo que será una “competencia fraternal”, como había expresado Dalmau la semana pasada.
Otro presente desde temprano en la asamblea fue el historiador y conductor del podcast Palabra Libre, Néstor Duprey, quien fue de los fundadores del MVC, y apoya la Alianza. A su lado estaba el actor Ángel Vázquez quien acababa de llegar de Estados Unidos donde presenta exitosamente sus monólogos. También estaban la profesora Palmira Ríos, y los candidatos del MVC a la legislatura, la abogada Rosa Seguí y el planificador Pedro Cardona Roig. También había varios manifestantes de campamentos ambientalistas.
El primero en dirigirse al público fue el aspirante a un escaño en el Senado por el distrito de San Juan, Adrián González, quien corroboró que la sala tenía 4,000 sillas, pero que superaron esa cantidad de asistentes. “Es la asamblea más concurrida en los últimos años”, dijo.
Después vino el exsenador Fernando Martín, quien narró de cuando él se postuló por primera vez a la política en el año 1984 y cómo ha ido cambiando tanto la colectividad como el país con eventos como la salida de la Marina de Vieques, el huracán María o el Verano del 2019. Habló también que él ha liderado algunas de las negociaciones con el MVC y que siente un gran optimismo de cara a las próximas elecciones.
“Este es un acuerdo sensato, prudente, diáfano, transparente que maximiza nuestras posibilidades”, dijo, sobre la Alianza. Además, reiteró que trabajarán juntos en aquellos puestos en los que los candidatos del MVC no compitan con el PIP.
Formal, anónimo e invisible
Sobre quién irá por el PIP a la comisaría residente en Washington, Martín dijo que lo anunciarán más adelante, pero que será un candidato “formal, pero anónimo e invisible”.
También dijo abiertamente que todo el PIP hará campaña y que votarán por Manuel Natal, del MVC, para que gane la alcaldía de San Juan. Fue entonces cuando presentó al presidente del PIP, Rubén Berríos Martínez.
“Nosotros no vamos a esconder ni en un lobby ni en un callejón. Esta multitud confirma que la tierra prometida ya se ve”, dijo Berríos Martínez, en alusión a los mítines de Jennifer González y Pedro Pierluisi del PNP, que han sido en espacios pequeños para que pareciera que había más gente.
“Se ve la tierra prometida de (Ramón Emeterio) Betances, de (Eugenio María) Hostos, (José) De Diego, de Don Pedro (Albizu Campos), del Gilberto (Concepción) y de tantos otros. Está ahí y vamos a llegar a ella”, añadió en un discurso en el que demostró su poder de oratoria, sin la ayuda de papeles ni telepromter, como suelen hacer los políticos actuales.
Berríos Martínez dijo que a los independentistas les caracteriza la decencia y la honestidad, y que “el pueblo puertorriqueño, en esencia se divide en dos grupos: los que ya son independentistas y los que están camino a ser independentista”, lo que arrancó aplausos de los asistentes.
Enfatizó en el que el gobierno malo e ineficiente ha llevado al país a la quiebra y que el PIP exigirá saber quiénes son los responsables. “Por eso la gente está viendo la Alianza como una opción, porque necesitan decencia”.
Berríos Martínez dijo que hay cuatro puntos específicos para lograr conseguir los votos para la Alianza: 1) Que no se visiten “todos los barrios, todas las calles y todos los pueblos para llevar el mensaje de transformación” del PIP y MVC; 2) promover la inscripción, especialmente los que no votaron en el 2020; 3) que haya representantes en todos los colegios electorales y 4) que ayuden en la recaudación de fondos para la campaña.
Después se presentaron los dos legisladores del PIP que fueron ratificados en la asamblea. El primero fue el representante Denis Márquez, quien habló de su trayectoria legislativa. Entre los temas destacó que continuará exigiendo rendición de cuentas a la Junta de Control Fiscal, combatiendo el “desastre que hay en la salud” para que sea accesible, y seguirá defendiendo el patrimonio de los recursos naturales y el patrimonio cultural del país. Abogó además por respaldo a sus iniciativas en defensa y protección de la niñez, de las comunidades LBGTTQI+, y de la Universidad de Puerto Rico.
Luego vino la senadora María de Lourdes Santiago, a quien presentaron diciendo que, si gana la Alianza, ella debe ser la próxima presidenta del Senado. La elocuente senadora dijo un discurso enérgico, emotivo y hasta personal, porque comenzó narrando que cuando se postuló por primera vez en el 2003 ella anunció en una asamblea que estaba embarazada, y ahora anunció que para las elecciones del 2024 su hijo José Julián emitirá su primer voto por el PIP y la Alianza.
Santiago hizo una férrea defensa de la empresa privada y de los empresarios puertorriqueños ante la injusticias que es la Ley 22, favoreciendo a extranjeros. “Basta ya de ese discrimen”, dijo, y además exigió que se sepa “con nombre y apellido” los culpables que llevaron a Puerto Rico a la quiebra.
Presentación de Dalmau
Fue entonces cuando subió al templete la esposa de Dalmau, Griselle Morales, ataviada de blanco como fue también vestida la senadora Santiago. El blanco simboliza a las mujeres sufragistas y la solidaridad femenina, en los Estados Unidos, que luego ha sido copiado por varios países latinoamericanos.
Morales sorprendió a muchos de los presentes porque no suele hablar en eventos políticos, pero narró aspectos íntimos de su vida en familia y la lucha que han tenido. No pasa inadvertido el hecho de que su familia se ha tenido que fortalecer ante los retos. Basta recordar cómo en el chat de Telegram los funcionarios del gobierno planificaban cómo destruirla en su trabajo en el gobierno por el sólo hecho de ser esposa de Dalmau. Su presentación parecía la de una experimentada una primera dama.
“Voy a presentar momentos en mi vida con Juan”, dijo Morales, comenzando su mensaje. Narró que a los cinco meses de novios a Dalmau lo metieron preso durante 33 días por desobediencia civil en Vieques, y que desde ahí vio su compromiso. Llevan 27 años juntos, de los cuales 23 son como casados.
El segundo reto fue cuando nació su hija coincidiendo con las elecciones de 2008 y que la bebé estuvo hospitalizada. Dijo que eso los ayudó para entender cómo cumplir como familia con todas las responsabilidades como la familia, el PIP y el país y los preparó para el gran reto que enfrentaron en las elecciones del 2016. Ese fue el año en que tuvieron que hacer un alto porque su hijo Gabriel fue diagnosticado con cáncer, tuvo que tomar tratamiento y ya lo superó. “Va a emitir su voto por el PIP”, dijo.
Dijo que a su familia los mueve el orgullo por Puerto Rico. “No permitamos que la maldad y quien quiere hacernos daño. No acepten el miedo. Cojan fuerza porque la maldad no puede ganarle a la decencia que ese es el triunfo de la esperanza”, dijo Morales usando el lema de campaña. Luego presentó un vídeo promocional antes de la entrada de Dalmau.
Dalmau enfatizó en la Alianza
Ya la gente estaba cansada porque la jornada se extendió, pero cuando llegó Dalmau a la tarima, los ánimos se reactivaron. Una multitud de banderas del PIP, ondeaban, mientras la gente gritaba y aplaudía.
Dalmau agradeció a su familia, pero dedicó el inicio de mensaje a la generosidad que ha tenido el MVC para unirse contra el bipartidismo. “Este es nuestro momento, los días de bipartidismo están contados”, dijo, lo que arrancó aplauso.
Habló de limpiar el gobierno de la corrupción y dijo que cuando le preguntan quién va a trabajar con él, responde que “quien lo merezca, porque los empleados en mi gobierno van a trabajar por mérito”. También habló de temas económicos, del apoyo que se tiene que dar al empresarismo local y a los empresarios puertorriqueños para mejorar la economía, ya que eso es parte de la política de la social democracia que es la que él respalda.
“A la patria se le sirve. No se le cobra gobernar. Se trabaja por mérito. No es para lucrarse, es para servir”.
“La visión de patria nueva es una visión de gobierno honesto y de gobierno efectivo. Y, al mismo tiempo que se impulsa un proceso serio de descolonización de manera democrática”, dijo.
Abogó por los derechos civiles, recordando que esta asamblea se celebró el Día Internacional de los Derechos Humanos.
Dalmau cerró diciendo que compite por amor. “Porque si no es por amor, no vale la pena”, y que por eso la Alianza representa “el triunfo de la esperanza”.
