Por Redacción Es Noticia
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Entre gritos, consignas y expresa frustración, decenas de personas, muchas de ellas mayores, se unieron este lunes a la manifestación realizada en el Viejo San Juan contra la administración de la gobernadora Jenniffer González Colón.
El grupo, compuesto por ciudadanos de diversas edades, denunció el aumento en el costo de vida, los cierres de negocios, y el encarecimiento de la electricidad y productos básicos como la leche, lo que —según los manifestantes— ha deteriorado la calidad de vida de los puertorriqueños y ha puesto en riesgo la estabilidad de miles de pensionados.
La protesta, convocada a través de las redes sociales, reunió a decenas de personas en las calles del Cristo y Fortaleza, donde exigieron la salida inmediata de LUMA Energy y la implementación de un sistema eléctrico accesible y libre de privatización.
Algunos manifestantes se vistieron de jíbaros y jugaron dominó como símbolo de resistencia cultural, mientras coreaban consignas contra la política energética del gobierno.
“Esto es un crimen social. Nos están quitando la posibilidad de vivir dignamente”, expresó uno de los participantes, señalando que los aumentos en la factura de la luz afectan de manera desproporcionada a los sectores más vulnerables.
Entre los asistentes también se encontraban representantes del Movimiento Socialista de Trabajadores y jóvenes universitarios, quienes criticaron lo que calificaron como la falta de liderazgo del gobierno ante la crisis energética.
Los reclamos se centraron en la necesidad de una reforma energética justa y transparente, que garantice un servicio confiable sin depender de empresas privadas.
“El país no aguanta más. Estamos pagando más por menos servicio y sin rendición de cuentas”, afirmó otro manifestante.
Bajo el intenso sol del mediodía, los participantes prometieron mantener la presión en las calles hasta que el gobierno escuche sus reclamos y tome medidas concretas para reducir el costo energético y proteger a las familias puertorriqueñas.
