Por Ana Delma Ramírez
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El triatlón olímpico en el Río Sena se llevó a cabo luego de una espera entorno a una discusión sobre la contaminación de ese cuerpo de agua.
El triatleta canadiense Tyler Mislawchuk, quien realizó su competición en el Sena, al salir y atravesar la línea de la meta vomitó 10 veces frente a los espectadores y medios de comunicación que cubrían el evento.
La calidad del agua del Río Sena ha levantado una constante controversia desde la preparación de los Juegos Olímpicos del 2024.
Este cuerpo de agua acarrea una historia de contaminación. Parece que los esfuerzos por recuperar la limpieza del mismo no han dado resultado.
La preocupación de presentar en el Sena competiciones de natación, así como otras actividades acuáticas durante la olimpiada siempre ha estado presente. Han hecho reclamos para que se identificara sedes alternas lo que presuntamente no ha ocurrido.
Medios de comunicación internacionales informan que hubo retraso y situaciones técnicas que no contribuyeron al saneamiento del Sena.
El triatleta canadiense habló con la prensa y les expresó: “los últimos cuatro kilómetros fueron mortales, comencé a sentirme mal, sufrir de mucho calor”, se ha especulado que al nadar en el Sena contaminado pudo provocarle colitis hemorrágica y diarrea entre otros padecimientos.
