Por Redacción Es Noticia
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Washington D.C. – El Gobierno Federal de Estados Unidos enfrenta un inminente cierre a partir del miércoles debido al estancamiento entre demócratas y republicanos sobre la aprobación de un presupuesto adicional. El presidente Donald Trump ha calificado como “inaceptables” las exigencias de la oposición y ya prepara medidas que incluyen el despido masivo de funcionarios.
El Congreso tiene hasta las 11:59 p.m. de este martes para aprobar un presupuesto o una medida de financiación temporal que permita mantener operativas las agencias federales consideradas no esenciales.
El pasado 19 de septiembre, los republicanos presentaron un presupuesto provisional para extender la financiación por siete semanas, pero este fue rechazado en el Senado, donde la mayoría conservadora necesita al menos siete votos demócratas para lograr su aprobación.
Exigencias enfrentadas
Los demócratas condicionaron su apoyo a la extensión presupuestaria a que se prorroguen los subsidios del Obamacare, que expiran a fin de año, y se reviertan los recortes a Medicaid aprobados en julio. Trump, sin embargo, ha rechazado de plano estas demandas, a las que tachó de “completamente irrazonables”. Además, canceló negociaciones previstas con líderes demócratas y responsabilizó a la oposición de un eventual cierre.
Consecuencias del cierre
De no alcanzarse un acuerdo, las agencias federales deberán suspender a los empleados considerados no esenciales, mientras que quienes realicen funciones críticas –como agentes del FBI, la CIA, controladores aéreos, personal de seguridad en aeropuertos y miembros de las Fuerzas Armadas– deberán seguir trabajando sin recibir salario hasta que se aprueben los fondos.
Un memorando de la Oficina de Gestión y Presupuesto reveló que la administración Trump ha instruido a las agencias a preparar despidos a gran escala en programas no esenciales, lo que genera preocupación sobre la magnitud de los recortes.
Antecedentes
El último cierre parcial del Gobierno ocurrió en el primer mandato de Trump y se convirtió en el más largo de la historia del país: duró 35 días entre diciembre de 2018 y enero de 2019, con 340,000 empleados federales suspendidos sin sueldo.
Hasta el momento, los planes de contingencia que cada agencia debe preparar en caso de cierre no se han hecho públicos, lo que aumenta la incertidumbre sobre el alcance que podría tener esta nueva paralización de la Administración Federal.
