Por Sandra Caquías Cruz
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La esposa del alcalde Luis M. Irizarry Pabón, Miyady Velázquez Pagán, ofreció una entrevista radial en la que reiteró que su esposo es inocente de las acusaciones que le hacen y que fue coaccionado para que firmara un acuerdo condicionado a la posible renuncia de su candidatura a la reelección.
“El doctor Irizarry Pabón es inocente”, dijo en una entrevista con la emisora WKAQ y Wapa TV. “Estamos confiados en que él es inocente», aseguró la esposa, quien también indicó que no pondría las manos en el fuego por nadie incluyendo su esposo.
Indicó que la situación de Irizarry Pabón, quien mañana -jueves- enfrenta una Vista Preliminar por cuatro cargos, dos de enriquecimiento injustificados y dos por violación a la Ley de Ética Gubernamental, «se ha vuelto una cacería, señalamientos incorrectos y fuera de lugar que entristece”.
«Esta semana, estamos confiando en que aflore la verdad. Esto comenzó como una acusación que va por procesos y en todas las personas que ha caído, son personas que están ligadas al Partido Nuevo Progresista; son activistas penepé», indicó.
Insistió en que detrás de las acusaciones hay un andamiaje del Partido Nuevo Progresista para perjudicar a su esposo y obtener votos. “Quieren cazar todos los votos que él representa… todos los partidos contrarios”, dijo.
Reiteró que su esposo es inocente y que no ha tocado dinero que no le corresponde. Indicó que tanto en su hogar como en el de su esposo «nos enseñaron que lo que no es nuestro no lo tocamos”.
¿Doctora, usted cree que yo le creo? le expresó el entrevistador. “Me acabas de conocer ahora. Tienes todo tu derecho a creerme o no creerme… yo te estoy diciendo delante de la presencia de Dios y de todos ustedes, que nosotros no somos pillos», respondió.
Insistió en que su esposo “no miente” y que «el llamarle pillo a él es llamarnos pillo a toda la familia».
«Que quede meridianamente claro que él es inocente», dijo. “El doctor Irizarry Pabón es inocente”, insistió.
Sobre el acuerdo indicó que no estuvo presente cuando se firmó, pero invitó a que juzgaran si el decirle a la persona “si no me firmas este documento, no te certifico» no era coacción.
Aseguró que Ponce los quiere. “Nos quieren”, dijo.
