Por Redacción Es Noticia
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Una emotiva ceremonia, con una lluvia de flores, fue el acto de clausura de las actividades del 50mo aniversario del desaparecido pelotero boricua: Roberto Clemente.
Decenas de personas acudieron a la actividad para recordar el legado y expresar su admiración a la gran hazana del astro boricua que murió en un accidente aéreo.
Las aguas del mar recibieron miles de pétalos amarillos de sobre 2,000 flores que fueron lanzadas desde un helicóptero. Mientras, los presentes guardaron silencio durante un momento de reflexión. Así concluyó el solemne acto en recordación de Roberto Clemente y los tripulantes que le acompañaban en el trágico vuelo del 31 de diciembre de 1972.
El evento, que contó con la participación de la familia Clemente y representantes de la Fundación Roberto Clemente, fue celebrado frente al mar en el sector de Piñones, Loíza, ubicado en las coordenadas donde ocurrió el trágico accidente.
El pueblo de Puerto Rico se desbordó en muestras de cariño llevando ofrendas y música al lugar del evento.
A cincuenta años de la desaparición de Clemente, cuyos restos nunca fueron recuperados, el lugar específico del accidente fue recientemente incluido en el Registro de Lugares Históricos de Estados Unidos (National Register of Historic Places).
El próximo paso es el inicio de los trabajos para dar paso a la creación de un parque pasivo y memorial para las víctimas del accidente.
Durante la breve ceremonia de recordación también estuvo presentes la alcaldesa de Loíza, Julia Nazario, quien dio la bienvenida a los presentes; Sr. Thomas C. Brasuell, presidente de la Fundación Roberto Clemente; el afamado astro boricua Carlos Baerga, quien tuvo a su cargo la invocación del evento; Ángel Gabriel Lozano, hijo de Ángel Lozano, uno de los tripulantes que acompañaban a Roberto Clemente en el histórico vuelo y el capitán Carlos Benítez, presidente de Benítez Aviation, quien piloteó el helicóptero que realizara la ofrenda floral desde el aire.
Luis Roberto Clemente, hijo del astro boricua y presidente del Roberto Clemente Legacy Program, compartió con los presentes la importancia de ese espacio como el lugar de recordación, donde por 50 años, acompañados por su madre Vera Cristina Zabala viuda de Clemente se han congregado en familia para recordar a su padre y a los demás tripulantes de ese trágico evento.
Doña Vera, como cariñosamente la conocía el pueblo puertorriqueño falleció el 16 de noviembre de 2019.
