Por Redacción Es Noticia
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Desde la medianoche de ayer, todas las importaciones desde China hacia Estados Unidos, incluyendo Puerto Rico, están sujetas a un arancel del 10% como parte de las medidas impositivas implementadas por el presidente Donald Trump contra China, México y Canadá.
Expertos advierten que esta decisión podría afectar seriamente la economía estadounidense, con repercusiones directas en el comercio de bienes de consumo. De hecho, la provincia canadiense de Ontario anunció la suspensión de la importación de productos alcohólicos de EE.UU., lo que representa un impacto de casi 700 millones de dólares en la industria de exportación estadounidense.
La economista Heidi Calero advirtió que esta nueva política golpeará el bolsillo de los consumidores en Puerto Rico, ya que el incremento del 10% en los aranceles aplicará a una amplia gama de productos importados desde China, incluidos alimentos, bebidas alcohólicas y productos manufacturados.
Calero también señaló que estas medidas han generado una peligrosa incertidumbre en el comercio estadounidense, lo que podría afectar los precios y la disponibilidad de ciertos productos en la isla.
