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Por Ana Delma Ramírez
redaccion@esnoticiapr.com
José Luis Ruiz Laboy, ampliamente conocido como “Bohío”, se describe como un paria del Movimiento Masters y a su vez afortunado atleta del deporte de atletismo.
Incursionó en este deporte en sus estudios intermedios en la escuela Rafael Pujals, donde se dedicó a eventos de velocidad 100, 200 y 400metros, bajo la tutela y dirección del fenecido profesor y atleta Israel Pérez, entre otros.
Años más tarde, en la escuela vocacional Bernardino Cordero Bernard estudió Dibujo Arquitectónico [Delineante], preparación que le sirvió para conseguir una beca universitaria en el Recinto Universitario de Mayagüez, donde el destino le modificó su modalidad atlética a semifondista. Posteriormente, se adentró en el fondismo corriendo carreras pedestres de 5, 10, 15 kilómetros y hasta un medio maratón en Vieques.
Sobre medio siglo dedicado al atletismo, unas veces como atleta y otras en la prensa deportiva, sin descartar actividades de “atletas másters”, Bohío, quien heredó el apodo de uno de sus cinco hermanos, ha participado en 12 mundiales Másters. En ellos obtuvo tres medallas de bronce y llegó a finales en 800 y 1,500 metros. Con registros de 800m 3:00 y 1,500 en 6:00, ya con la edad de 66 años.
En la más reciente participación del Mundial Másters de 2024, hace apenas unas semanas en la ciudad de Gotemburgo, Suecia, fue el único atleta ponceño. En unión a Wilson Molina, Juan Rodríguez y Neftalí Sánchez éste de 77 años, corrieron el relevo 4x400metros arribando en cuarta posición con tiempo 4.59.03
Bohío nació en el barrio Villa Olga, lo que luego se convirtió a Santa Clara, con unas residencias de techo cóncavo, que las personas las asociaban con un bohío; y es de ahí que surge su apodo. Su trayectoria, como dijo a Es Noticia, incluye haber sido campeón nacional en 100, 200 y 400metros en competiciones escolares y juegos internacionales juveniles.
Estudió grado superior en ingeniería industrial, también estudio electricidad. Ante la muerte de su padre, a muy temprana edad, se hizo jefe de familia y con el dinero de su beca mantenía a la familia. Fue juez internacional de atletismo habiendo superado los cursos internacionales de la otrora IAAF, juez de la Asociación del Sur. Hizo la selección de atletismo para la Olimpiada de Moscú quedando trunca por el boicot.
Su paso por la LAI, otras competiciones como Justas AEELA, las que organizó bajo los telefónicos cuando prestó 33 años de servicio a la Telefónica de Puerto Rico. Sus intervenciones en medios de comunicación han sido como analista, comentarista y estadístico. Lo consagran como un experto en el tema deportivo.
“Soy hombre de valores, he sido sindicalista estuve dos días preso por la huelga general de la telefónica, el deporte me ha hecho un buen ciudadano. Ahora me dedico a ayudar a mis vecinos y amigos. Los llevo a citas médicas, a quimioterapias y les resuelvo muchos de sus problemas, no tengo filtro, expreso las cosas como son, lo que me ha cerrado puertas y abierto otras”, dijo.
Bohío es miembro de la Asociación de Periodistas Deportivos de Puerto Rico. “Debo al atletismo todo lo que soy, afortunado de haberme adentrado en este mundo que me convirtió en una gran persona, no estoy en ningún Salón de Fama deportivo, soy cristiano activo y mi norte es hacer el bien”, manifestó.
Este corredor es un icono del fondismo. Su habitual presencia en las calles del país en pruebas de larga distancia como atleta y en las narraciones de diferentes carreras, la más reciente en el municipio de Juana Diaz, el 10k San Ramón, donde compartió transmisión con el periodista Raúl Cintrón.
Basado en su experiencia en décadas dedicadas al deporte le han hecho un conocedor de las complejas situaciones, marcas, estadísticas y datos sobre los corredores, como para aportar sabiduría a ese tipo de evento.