Por Redacción Es Noticia
En el séptimo día de su lucha contra el coronavirus, el periodista y trabajador social clínico Jorge Almodóvar Capielo destacó hoy, viernes, cuán doloroso ha sido vivir el proceso.
El dolor lo describió tanto físico como emocional. Esto por los tratamientos médicos que recibe y la ausencia de la presencia física de sus seres queridos.
“Sientes el límite del dolor. Dolor por las pruebas diarias sacando muestras arteriales de oxigenación, es un dolor que llega al alma. Dolor por las decenas de tubos de sangre que te sacan y convierten tu brazo en un solo moretón por tantos pinchazos. Dolor en el abdomen donde te inyectan anticuagulantes dos veces al día, pues una de las estrategias del COVID es comprimir tanto tus venas que provoca coágulos que podrían causar problemas mayores. Dolor en tu pecho de tanto toser ya sin poder. Ese es el dolor físico. Luego está el dolor de la soledad, el dolor de no saber si mañana llegará, el dolor de querer estar con los tuyos y no puedes. El dolor de pensar todo lo que te queda por hacer y ver que el tiempo se te escapa”, explicó en una publicación de la red social Facebook.
Narró, también, que se le ha dificultado conseguir el sueño, ya que por ocasiones respira con facilidad y, luego, súbitamente siente la ausencia de oxígeno.
“Así es el miserable COVID, te ataca y no puedes descuidarte”, afirmó.
Asimismo, agradeció a todos aquellos que han mostrado gestos de cariño hacia su persona, incluyendo personas desconocidas. Sobre todo, resaltó la encomienda de los profesionales de la salud.
“No pasen frente a un hospital sin detenerse a orar. Allí se libra una batalla por la vida de la cual no se tiene real conciencia. No podemos olvidar a ese personal agotado, exhausto pero comprometido. Ellos no pueden ir de paseo, ni de chinchorreo, ni a la playa y pasaron Navidad y Reyes aquí. No finjamos que todo está bien. El egoísmo nos hace olvidarlos…hasta que nos toca”, exhortó.
“Desde la fe, ves todos estos dolores con agradecimiento a Dios, aunque no los entiendas. Sabes que Dios sacará siempre un bien mayor. Por eso, con el mismo Jesús digo ‘Padre aparta de mí este cáliz, pero no se haga mi voluntad sino la tuya’. Sus oraciones y muestras de afecto son un bálsamo que leo una y otra vez durante el día y alivian mi soledad. Soy tan agradecido de Dios. Tengo tesoros invaluables y creo que a veces al darlos por sentado no los he valorado como merecen. Gracias a todos: Familiares, amigos, conocidos, desconocidos que me han escrito incluso desde lugares que ni imaginaba. En especial, gracias a mi equipo de enfermeras y enfermeros, terapia respiratoria, médicos, empleados de limpieza, personal de farmacia y laboratorio, técnicos de rayos X, en fin, los héroes sin capa que dejan a los suyos para ayudarnos a vivir”, agregó.
Capielo, locutor de En Vivo Desde Ponce, anunció de su diagnóstico el sábado, 2 de enero. Ese mismo día, fue ingresado a un hospital del área.
