Por Redacción Es Noticia
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Residentes en la urbanización La Margarita, en Salinas, intentan evitar que una iglesia pentecostal -ubicada en ese vecindario- instale antenas de telecomunicaciones en los predios del templo.
“Hace cinco años protestamos, pusimos unas querellas y en ese momento se detuvo la construcción, a pesar de que levantaron la torre. Ahora la empresa Innovatel Properties pretende terminar la construcción y quiere colocar antenas de 4 compañías, funcionando con permisos y endosos expirados», denunció Wanda Janet Ríos Colorado, portavoz del Comité Pro-Bienestar de la Comunidad La Margarita.
Explicó que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) también se negó a otorgarle endosos y no cuentan con el certificado de la Federal Aviation Administration (FAA), porque le fue cancelado en 2015.
Indicó que, en el 2015, la empresa Wireless Solution fue quien levantó en el patio de la iglesia, en horas nocturnas, la torre de telecomunicaciones, eso sin considerar las protestas de los residentes de la urbanización.
En un comunicado de prensa, la comunidad informó que en el portal cibernético de la Oficina de Gerencia de Permisos hay evidencia de que cuatro solicitudes de recomendaciones para la infraestructura fueron denegadas y la Pre Consulta fue archivada en el 2017.
“Lo que pedimos es que se haga valer la ley. El Reglamento 13 de la Junta de Planificación prohíbe que se construya en esas áreas especiales de inundación. Además, FEMA llega unos acuerdos para dar fondos para hacer arreglos, darnos los seguros (aquí en La Margarita hay como 100 familias que le dan de esos seguros de inundaciones), con la condición de que el gobierno de Puerto Rico vele que no se agrave más la situación de inundabilidad, que no construyan en valles inundables que puedan agravar la situación y que tengan planes de mitigación”, indicó.
Ríos recordó que La Margarita es una comunidad que ha sido afectada por los grandes eventos de lluvias.
“Para el huracán María volvimos a sufrir la inundación de nuestros hogares. En algunos lugares el agua llegó hasta los seis pies en la carretera. Esa parte [de la iglesia] está diseñada como un área de drenaje del Río Nigua. La construcción afecta el flujo del agua. Una pulgada de cemento adicional, es una pulgada adicional que va a subir el nivel del agua en nuestras casas. Esto puede significar la vida o la muerte para los vecinos en un evento de lluvia”, dijo.
La comunidad informó que tiene unos proyectos que están desarrollando, como convertir su centro comunal en uno resiliente, por lo que temen que la construcción en la antena aumente la cantidad de agua que llega a la comunidad y dar al traste con esos planes.
Por su parte, Zoraida Colorado Malavé, residente de la urbanización desde varias décadas, dijo que ellos están tratando de que llegue menos obstrucción al río. «Y entonces están construyendo eso en el mismo cauce del río. Aquí vino un hidrólogo y nos dijo que esto está en A1, o sea que estamos en el centro del río. Ahora hay cuatro empresas que quieren poner sus antenas en esa torre ilegal. Nos oponemos al proyecto”.
Tanto los residentes de La Margarita como los propios feligreses de la iglesia, podrían verse afectados debido a las antenas, ya que existe evidencia del daño en la salud de las personas que causan estos artefactos tan cercanos a las personas.
