Por Sandra Caquías Cruz
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Los trillizos Aaron, Alahia y Aitanna regresaron a celebrar -en plena Navidad- al Hospital Pavía, en Yauco, en el que llegaron al mundo el pasado 15 de febrero tras el meticuloso cuidado a una madre que se enfrentaba a un parto poco común en Puerto Rico: el nacimiento de trillizos.
Los hermanitos nacieron por cesárea porque no estaban en posición, explicó la mamá, la guayanillense Joreleyka Narváez Rodríguez, vecina del barrio Las Quebradas. Era el primer embarazo de Joreleyka, esposa de Jonathan Santana.
La joven madre relató que se enteró que tendría trillizos cuando apenas tenía dos meses de gestación. “Lloré de felicidad», describió sobre el momento en que supo del acontecimiento.
El embarazo fue relativamente normal, aunque con muchos vómitos. Tanto en la familia de Joreleyka como la de Jonathan hay gemelos por lo que no le extraño un embarazo múltiple, pero ni sospechar que sería tres en uno. La pareja tenía tres años de casada cuando conoció que tendría los trillizos.
Las niñas nacieron sin mayores problemas. Aaron tuvo problemas que requirieron una intervención quirúrgica semanas después y que logró superar, explicó su mamá, quien interrumpió sus estudios de enfermería para dedicarse al cuidado de los pequeños.
“Espero retomar mis estudios dentro de unos años”, dijo en su visita al hospital Pavía de Yauco, donde los esperaban con regalos para los pequeños. Destacó que, aunque actualmente reside en Guaynabo, viaja a Yauco para llevar los niños al pediatra que los atiende desde que nacieron.
“Ellos están muy bien. Ninguno me da mucho trabajo. Cuando voy a salir necesito un poco de ayuda, pero en mi casa son tranquilos”, describió sobre su rutina.
Explicó que pudo lactar al varón y que los trillizos le permiten dormir toda la noche. “Son tranquilos”, describió.