Por Redacción Es Noticia
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Florida — El año 2025 ha estado marcado por un aumento significativo en las redadas y detenciones de inmigrantes en Florida, una realidad que ha generado temor e incertidumbre en comunidades hispanas donde conviven cientos de miles de puertorriqueños con migrantes latinoamericanos que no cuentan con ciudadanía estadounidense por nacimiento.
Durante el año, el estado ha sido escenario de múltiples operativos de inmigración encabezados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), incluyendo la denominada “Operación Marea”, realizada en abril de 2025, que resultó en la detención de más de 1,100 personas. Reportes de medios locales y datos oficiales reflejan que los arrestos de inmigrantes en Florida se triplicaron, incluyendo un número mayor de personas sin antecedentes penales que aquellas con condenas criminales.
Entre los operativos más notorios se encuentran redadas en Tallahassee, donde más de 100 trabajadores de la construcción fueron detenidos, así como acciones en zonas agrícolas como Immokalee y Apopka, donde se arrestó a trabajadores del campo, algunos de los cuales alegaron tener documentos en regla. En octubre de 2025, agentes de ICE también detuvieron a decenas de conductores de Uber y Lyft en el área de Puerto Cañaveral, provocando denuncias por trato denigrante y traslados a centros de detención en Jacksonville y el sur de Florida.
A nivel nacional, ICE reportó que en lo que va de 2025 ha detenido a más de 200,000 inmigrantes, con decenas de miles bajo custodia y miles de remociones, incluyendo extranjeros con historial criminal. Aunque las cifras exactas de deportaciones en Florida no están completamente desglosadas, los datos confirman una actividad intensa y sostenida.
Expertos y líderes comunitarios advierten que estas deportaciones masivas podrían tener un impacto económico negativo significativo en el estado. Sectores clave como la construcción, agricultura, hotelería y servicios dependen en gran medida de la mano de obra inmigrante. La pérdida de trabajadores esenciales podría provocar escasez laboral, aumento de costos para los negocios, presiones inflacionarias, reducción del consumo y disminución en los ingresos fiscales estatales y municipales.
Además del impacto económico, las redadas han generado un ambiente de miedo generalizado en comunidades hispanas, particularmente en áreas como Doral, North Miami, Miami-Dade y Tallahassee. Organizaciones y abogados han denunciado casos de detenciones de personas con estatus migratorio regular y han reiterado la importancia de que los inmigrantes conozcan sus derechos durante estos operativos.
En medio de este panorama, también entró en vigor en julio de 2025 la Ley HB 915, que prohíbe a notarios no autorizados ofrecer servicios legales de inmigración en Florida, una medida que ha generado preocupación por el acceso a orientación legal para personas vulnerables.
Aunque la economía de Florida se mantenía robusta hacia finales de 2025, analistas advierten que el aumento en las redadas migratorias podría convertirse en un freno al crecimiento económico y profundizar tensiones sociales, al tiempo que reaviva el debate sobre la aplicación de la ley migratoria y su impacto humano y económico en el estado.
