Por Redacción Es Noticia
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Los representantes por el Partido Popular Democráticos Héctor Ferrer Santiago, Deborah Soto y Estrella Martínez denunciaron la posible pérdida de $13.8 millones en Educación para la compra e instalación de 300 vagones en 121 escuelas bajo la categoría de fondos de emergencia.
“Una vez más mientras se ponen en peligro los fondos destinados para resolverle los problemas a la gente, Pedro Pierluisi y Jennifer González están dejando que estas cosas pasen”, expresó Ferrer Santiago.
Según los datos publicados el Departamento de Educación solicitó fondos para la compra e instalación de 300 vagones en 121 escuelas bajo la categoría de fondos de emergencia. A pesar de que FEMA aprobó $13.8 millones para este propósito hace dos años, la agencia federal aún no ha recibido la información requerida sobre el alcance del trabajo del proyecto, incluyendo el número de unidades temporales necesarias en cada escuela y el calendario para su finalización.
“Es alarmante y totalmente inaceptable que esta escandalosa negligencia afecte directamente a los estudiantes. Esto se sigue sumando a otros hechos donde donde se ha revelado la pérdida de fondos federales y recursos comprados con fondos públicos. En agosto pasado el Departamento de Educación perdió más de $400,000 en alimentos congelados que tuvieron que ser decomisados y que debían formar parte de la oferta de comedores escolares de la región de Ponce en agosto y septiembre”, indicó Déborah Soto, presidenta de la Comisión de Educación.
“No hay duda que este patrón del Gobierno del PNP lacera la confianza y cuestiona la integridad del gobierno para administrar los recursos públicos de manera eficiente ante los entes federales y ante los ciudadanos», indicó Estrella Martínez, representante del distrito 27.
Además, Ferrer Santiago subrayó que “la falta de controles adecuados por parte del Departamento de Educación para proporcionar la información requerida por FEMA durante un largo período de tiempo es un claro indicador de negligencia. Este incidente destaca un patrón recurrente de incompetencia en la gestión de recursos públicos”.
Los representantes también hicieron hincapié en el papel bochornoso de las agencias locales encargadas de supervisar el uso de fondos estatales y federales, y concluyeron que esta lamentable situación refuerza la necesidad de un cambio en la dirección del Gobierno y la restauración de la confianza en sus líderes.
